¿Independencia?

(Julio 5)

Que el pesado aire que respiramos los venezolanos en cualquier parte del mundo y la miseria que perecen los hijos de esta tierra sean suficientes para recordar lo que significó aquel lejano 5 de julio.

“Abajo cadenas” dice el himno nacional de nuestro país, cuando nos vienen atando durante veinte largos años con cadenas forjadas con el más grande desenfreno, que ya no se rompen ni con el mayor perdón.

Hoy solo me sirve para recordar que no podemos celebrar independencia si no la tenemos, ni libertad cuando nos atan hasta los sueños.

Hoy es un recordatorio para aprender del ayer y cambiar el mañana. Hoy no se celebra libertad, porque hoy se añora. Hoy no se celebra verdad, porque esa también es una mentira. Hoy solo se celebran a aquellos venezolanos que han sabido recoger los hilos de un país que se ha ido deshaciendo como una hoja en un río, y que se nos ha escurrido entre los dedos como agua cristalina.

Se celebran aquellos que han podido pisar sobre un edificio en ruinas, que han aprendido a volar en parapente sobre lava caliente.

Se celebran a los que creen y a los que apuestan, a los que caen y se levantan, a los que ríen en las calles y lloran en sus casas.

Se celebran a los que han tenido que explorar la incertidumbre y a saborear la pena. Se celebra al venezolano que ha aprendido a romper esas cadenas, incluso sin darse cuenta.

Foto recuperada de La Patilla